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Este hombre estaría relacionado con el homicidio de alias ‘Pichigordo’, quien fue cabecilla de La Terraza. En un nuevo golpe contra el crimen organizado, las autorid...
En un nuevo golpe contra el crimen organizado, las autoridades lograron la imputación de Matías Álvarez Tabares, alias ‘Keiler’, por concierto para delinquir agravado con fines de narcotráfico. En una acción coordinada entre la Alcaldía de Medellín, la Policía Nacional y la Fiscalía General de la Nación, un juez de la República revocó la medida de detención domiciliaria que había obtenido y ordenó su traslado a prisión.
“Mediante proceso judicial, se estableció que alias ‘Keiler’ tenía bajo su mando un grupo de personas dedicadas al tráfico en el nororiente de la ciudad. Entre estos centros de venta de estupefacientes se encontraba la plaza ‘El Faraón’, la cual tenía 30 años de funcionamiento”, dijo el secretario de Seguridad y Convivencia, Manuel Villa Mejía.
Como parte de este proceso, en noviembre de 2024 fueron capturados 15 integrantes de su estructura, incluyendo a alias ‘Colas’, coordinador y mano derecha de ‘Keiler’. Además, las autoridades ocuparon nueve bienes inmuebles avaluados en más de $1.200 millones, afectando significativamente la capacidad económica de la organización.
Con más de 20 años de historial criminal, alias ‘Keiler’ escaló posiciones dentro de la estructura La Terraza, pasando de jefe de sicarios a cabecilla, con vínculos con líderes históricos de la organización como alias ‘Douglas’. También, estuvo implicado en el robo de $20.000 millones al Clan del Golfo en 2017.
“Ha sido capturado en tres oportunidades: una de ellas fue durante la primera administración del alcalde Federico Gutiérrez, el 25 de abril de 2019, en el barrio Laureles, por narcotráfico, extorsión, desplazamiento forzado y homicidio agravado. La última captura fue el 28 de junio de 2024 por homicidio agravado y porte ilegal de armas, en el caso del homicidio de alias ‘Pichigordo’, entonces cabecilla de La Terraza, el 7 de marzo del año pasado”, agregó el secretario.
Pese a haber sido capturado en tres oportunidades, en 2024 logró obtener detención domiciliaria en una lujosa residencia en Llano Grande, en un intento por evadir la justicia. Sin embargo, gracias a las nuevas pruebas presentadas por la Fiscalía, este beneficio fue revocado y se garantizó su reclusión en un centro penitenciario.